¿Qué tipo de precauciones debemos tener para la mantención de vehículos?
Un aspecto clave es reconocer qué tipo de señales hacen necesario y urgente un cambio de aceite.
Seamos nuevos o experimentados conductores, saber más acerca de la mantención de vehículos y cambio de aceite es algo que puede ahorrarnos grandes dolores de cabeza. Desconocer sobre esto nos puede dejar parados a mitad de camino, de noche, en una carretera solitaria. ¿Qué cosa puede ser peor que vivir una situación como ésta?
Pero, ¡qué no cunda el pánico! En Compara te queremos ayudar con información útil para evitar cualquier situación de riesgo. ¡Te invitamos a lubricar tus conocimientos automotrices y tomar nota!
Cambio de aceite: esencial en la mantención de vehículos
Un elemento importante que se debe considerar a lo largo de nuestra vida como conductores es la mantención de vehículos, revisión que se debe hacer con regularidad y responsabilidad.
Esta mantención integral, que parece engorrosa, nos trae muchos aspectos positivos, como por ejemplo:
Permite prevenir accidentes.
Mejora las potencialidades de nuestro vehículo y la experiencia de conducción.
Disminuye gastos extras por concepto de emergencias.
Evita malos ratos y una pérdida de tiempo por aspectos totalmente prevenibles.
Alarga la vida útil de nuestro auto y mejora sus condiciones y valores de reventa.
Para saber cuándo hacer la mantención de vehículos, tenemos que basarnos en los kilómetros que tiene nuestro transporte. Existe un consenso entre expertos sobre el primer ajuste que se debe hacer. Este se conoce como la mantención de los 10.000 kilómetros. Aquí se consideran algunos aspectos como: un cambio de aceite y filtro; cambio de filtro de aire; chequeo de filtro de combustible y de luces, frenos, batería, bujías, fluidos, correas, neumáticos, el tren delantero y trasero del auto.
Con el aumento del uso, cada 10.000 kilómetros y 20.000 kilómetros se debe pensar en someter al vehículo a una nueva revisión de los aspectos anteriores, además de un scanner para evaluar las fallas registradas en el sistema electrónico de nuestro vehículo. Desde los 40.000 kilómetros se puede sumar un chequeo completo que incluya cañerías y mangueras.
Al igual que muchos aspectos de la mantención de vehículos, el aceite juega un rol fundamental. Hay quienes le han llamado “el alma” del motor. Este “alma” se puede someter a un relleno, a un cambio de aceite completo o a una limpieza, según corresponda el estado en el que se encuentre y al tiempo que hemos dejado de mantenerla. Su rol es muy importante, ya que el aceite permite un sistema de lubricación que protege el deterioro por fricción de las partes metálicas del motor y disminuye el desgaste generalizado del automóvil en su conjunto.
Si no colocamos atención en la mantención del sistema de lubricación podemos afectar los elementos centrales y motores de nuestro automóvil, implicando costosas reparaciones que se hubiesen prevenido con un simple y económico cambio de aceite. En efecto, el recambio de aceite y filtro debe ser una de las tareas más rutinarias que debemos realizar, y que implican una mejora concreta para aumentar la seguridad, el funcionamiento del automóvil y su vida útil.
¿Cómo hacer un cambio de aceite?
La evaluación del cambio de aceite debe tender siempre a ser por iniciativa propia, porque no hay mejor remedio al problema que la prevención del mismo.
Al igual que el chequeo general del automóvil, se recomienda que cada 10.000 kilómetros se haga un cambio de aceite y del filtro. Aquí entra en juego el modelo del auto, lo sugerido por el fabricante y si usa aceite convencional o aceite sintético, pero el estándar para automóviles particulares es hacerlo entre los 5.000 y 10.000 kilómetros como máximo.
Es necesario mencionar que el cambio de aceite y de filtro es una labor de expertos. Hay quienes se aventuran e intentan hacerlo por cuenta propia, pero eso no asegura que quede bien hecho y que evite problemas futuros en concepto de fuga de fluidos, por ejemplo.
Cuando realices el procedimiento de renovación del lubricante y del filtro, asegúrate de actualizar en una calcomanía u hoja visible la fecha de recordatorio para el próximo recambio.
Revisión y relleno de aceite
Otra rutina de mantenimiento de vehículos que se debe considerar es la de la revisión manual del nivel de aceite. Esto, según el manual del conductor de la CONASET, se hace con un control donde se levanta el capot y se mide el nivel de aceite con la varilla correspondiente. Si el nivel está bajo, se agrega más aceite. Hay quienes “limpian” la varilla con un paño claro para evaluar si el aceite “está quemado”, pero esto es un mito, ya que el cambio de aceite y filtro debe ser regular, evitando un sobreuso del material.
La revisión del sistema de lubricación debe considerarse permanentemente, tal como el nivel de agua y de combustible. Sobre todo, se debe tener especial atención antes de un viaje largo en carretera o autopistas, ya que una falla de este tipo puede ser realmente dañina.
En el caso que “se nos haya olvidado” colocar atención y el nivel de aceite sea crítico, se activará una luz de alerta en nuestro tablero, que indicará un bajo nivel de presión de aceite. Si esto sucede, se recomienda apagar el motor, esperar hasta que se enfríe un poco y subsanar el déficit.
¿Qué tipo de aceite de vehículo usar?
El tipo de aceite del auto está ligado a la viscosidad que tiene, o sea, a su capacidad de fluir o desplazarse, la cual se va perdiendo a lo largo del tiempo con el uso del vehículo.
El aceite a utilizar es el que determina el fabricante, y si bien se pueden consumir diversas marcas, nunca es bueno mezclar viscosidades.
Además, cuando un aceite es sometido a temperatura alta, se vuelve más “liviano”, y su capacidad de lubricación disminuye. De esta forma, los tipos de aceites se miden con dos números, separados por una W: los números que le preceden corresponde a la viscosidad en frío y los que están después de la W corresponden a la densidad en caliente.
De este modo, hay algunos tipos que podemos revisar en base a esta información expuesta por Guioteca:
5w30 – 5w40 – 5w50: son aceites sintéticos, que rinden sobre 10 mil kilómetros. Son recomendados para vehículos nuevos o con poco uso. El rango de temperatura es de -30° a 50° ambiente.
10w40: semisintético o sintético, es recomendado para 7 mil kilómetros. Este aceite es el más utilizado por los vehículos nuevos. Es para temperaturas ambiente entre -20° a 40°.
15w40: aceite mineral para vehículos diesel y bencineros. Recomendado para no más de 5 mil kilómetros. Rango de temperatura ambiental de -10° a 40°.
20w50: aceite mineral para vehículos con mayor desgaste, su rendimiento es recomendado para 5 mil kilómetros. Tiene un rango similar al 15W40.